Haciendo la cola para empezar ese insportable trámite, me aburro y escucho.
Ay viste?
Sí. Dvina la casa.
Sí, pero y las cuatro mucamas?
Cuatro? yo vi cinco!
Bueno las cinco mucamas, es lo mismo. Una locura.
Sí.
Además, el cuarto de ella con un plasma increíble como de ponele, ay no sé de pulgadas, muchas pulgadas.
Sí pero el cuarto de él, mucho más grande.
Obvio..siempre mostrando que la plata es de él.
Por un momento dejo de escuchar, realmente no me interesa esto.
Vuelvo a ajustar el oído, ahí.
Y la heladera? yo estaba sacándole fotos a todo, una vista increíble te digo.
Sí, la vi.
Bueno esas heladeras sólo son de restaurants, son industriales. Dos gigantes tienen en la cocina.
Y la cocinera, comiendo pancito con queso de cabra!
Increíble - creo que ya no le interesaba más la conversación-
A mi el queso de cabra no me gusta, viste, pero te digo, es carísimo! sabés lo que cuesta un queso de cabra entero?
Vuelvo a desconcentrarme pensando en otra cosa, en la chica de al lado que tiene cara de extranjera, en la revista que tiene el de atrás o MEJOR AÚN en cuánto daría porque me llamaran en ese momento y terminar de una vez el asunto de trámite.
Bueno pero eso es por el padre.
Sí.
Vos sabés no? -baja la voz- ella estuvo muy mal, y ellos siempre taparon su ausencia con regalos.
Sí, ya sé.
La última fue la del plasma, que ella lo llamó y se lo devolvió.
Qué se yo, a mi él me preguntó yo me hice la que no sabía nada.
Sí, obvio. Hay que hacer eso.
Bueno y si ponés todas las obras de arte en tu living así,
Es para mostrar toda la guita que tenés.
Obvio.
Conversaciones que no nos interesan pero escuchamos igual.
Y si alguien nos escuchara todo el tiempo, digo, TODO EL TIEMPO. Caería nuestra imagen rodando por la montaña, no?
No hay comentarios:
Publicar un comentario